Hedonai: mi centro estético de confianza

¡Queridos amigos!

¿Cómo habéis terminado la Semana Santa? Espero que hayáis tenido tiempo libre para descansar, practicar vuestras aficiones, viajar y disfrutar en la compañía de vuestros seres queridos, con los que nunca el tiempo es suficiente, o al menos en mi caso.

Hoy, que he vuelto al trabajo en Doble Erre, os traigo un nuevo post que espero os sea de ayuda, os oriente y os informe sobre tratamientos de salud y belleza súper beneficiosos. Como ya sabéis los que me seguís intento acudir con cierta frecuencia a los centros estéticos Hedonai. Es mi punto de referencia cuando de someterme a algún tratamiento se trata, y nunca mejor dicho, porque mi confianza en su calidad y profesionalidad es total y absoluta.

En Hedonai, cuyo equipo humano es altamente cualificado, me siento como en casa y los buenos resultados de sus tratamientos es algo que tengo más que comprobado, por eso repito una y otra vez. Uno de los consejos de belleza que siempre os doy, además de llevar una alimentación sana y hacer deporte, es cuidar vuestra piel. Y sobre todo, la piel del rostro que es la más expuesta, la más delicada y la que sufre directamente todas las injerencias externas, desde la contaminación a los rayos solares.

La piel, un órgano vital más

Nuestra cara es nuestro DNI, nuestra carta de presentación, nuestra primera impresión. Y no se trata de ser más guapo o más feo, ni del color de los ojos, ni la forma de la nariz. Es una cuestión de salud. La piel es un órgano vital más y a veces hacemos barbaridades que nos ponen en peligro. Por eso todos, absolutamente todos, hombres y mujeres debemos querernos y cuidar nuestro aspecto, y esto incluye la piel. Cuidar nuestra salud y nuestro aspecto incremente nuestra calidad de vida, sube la autoestima y mejora la relación con nosotros mismos y con los demás.

Y por eso desde esta ventanita os pido por favor a los más descuidados que aprovechéis la llegada del buen tiempo, de las fiestas de primavera, de las ferias y romerías, de las primeras escapadas a la playa… para poneros ‘a punto’ y en el caso de que os convenza Hedonai, pidáis cita. ¡No os váis a arrepentir!

Yo concretamente voy a hablaros de dos de los tratamientos a los que suelo someterme: la mesoterapia facial y la toxina botulínica.

La mesoterapia es un tratamiento para prevenir o tratar el envejecimiento de la piel. Recomendado tanto en personas jóvenes de más de 30 años, que comienzan a mostrar los primeros signos del paso del tiempo, como a personas mayores. Es una técnica que permite inyectar determinados principios activos muy beneficiosos para la piel, en la parte de la dermis.

Son muchas las ventajas que ofrece: afina las arrugas, aumenta la hidratación de la piel, mejora la calidad del tejido cutáneo en todas sus capas, permite mantener homogéneo el tono de la piel y tiene poder antioxidante. Este tratamiento ofrece muy buenos resultados no sólo en la cara también en cuello, escote, incluso manos. Tendremos la piel más lisa, firme, sana y brillante y nuestro tono de la piel será más homogéneo disminuyendo las pequeñas alteraciones pigmentarias.

En cuanto a la toxina botulínica, es un excelente tratamiento para combatir las arrugas de expresión del tercio superior de la cara. Está recomendado especialmente para aquellas personas que gesticulan con frecuencia y presentan arrugas, con patas de gallo muy marcadas, con arrugas en el entrecejo, etc. Es perfecto para personas a partir de los 25-30 años con un gesto muy pronunciado y con una piel muy fina ya que tendrán signos de envejecimiento más prematuro.

Entre sus ventajas: relaja los músculos que provocan las arrugas de expresión, elimina la dureza de nuestros rasgos y la fatiga, disminuye la fuerza de contracción de los músculos y actúa como efecto preventivo de arrugas.

De esta forma tendremos una mirada más suave, una expresión más relajada y un aspecto más descansado.

Bueno amigos, espero que estos consejos os sean de ayuda a los que ya cuidáis vuestra piel y que os estimulen a hacerlo a los que no le dais importancia: es importante, y mucho, cuidarnos y darnos lo mejor de nosotros mismos. Mirarnos al espejo y que nos guste lo que vemos. Insisto, no se trata de belleza física, sino de salud y bienestar.

Y ahora os deseo un buen arranque de semana. ¡Besos!