Os escribo estas líneas a tan sólo 2 horas del alumbrado de la Feria de Sevilla. Los sevillanos probablemente me entendáis perfectamente; y a los visitantes, ya expertos en la materia, les pasará lo mismo. Después de toda una vida viviéndola, cada año empiezo la Feria de Abril con la misma ilusión, con ganas de pasar buenos momentos y exprimirlos todo lo que se pueda. Me emociono cuando el martes por la mañana, o más bien a mediodía, piso el Real y ya todo lo que veo es hermoso. Las mujeres tan guapas con sus trajes de flamenca, peinadas y maquilladas para la ocasión, los espectaculares coches de caballos en sus diferentes categorías, la belleza y el poderío de este animal enorme y más noble aún, y la generosa y encantadora actitud del que ya está por sus calles y casetas y que contagia al que llega. Son días para aparcar por un ratito, cuanto más largo mejor, las penas y preocupaciones, y disfrutar de la familia y los amigos. En lo que a moda se refiere, he querido recopilar algunas imágenes mías de años pasados: me gusta verlas y ratificar cómo cada temporada cambian las tendencias en cuanto a formas, estampados, tejidos…, de mis trajes de flamenca. El próximo viernes os mostraré los vestidos de gitana que he elegido para esta Feria de Abril 2016. Hasta entonces, os dejo porque empiezo a arreglarme para ir al famoso «pescaíto«, que es la cena que los socios organizamos en las casetas y en las que no falta, como su propio nombre indica, el buen pescaíto frito. ¡Buena Feria para todos! Besos.