Me suele dar mucha pereza interrumpir las vacaciones que tenía organizadas porque de repente surja un plan imprevisto al que no se pueda renunciar. Pero es que este plan en concreto que os voy a contar era para mí una tremenda y maravillosa tentación por la que, si me hubiera negado a asistir en beneficio de mi descanso, aún me estaría arrepintiendo y arañando. Así que confirmé encantada mi asistencia al concierto que Hombres G dieron el día 8 de agosto en la Plaza de Toros de Algeciras, el tercero de los muchos que están ofreciendo no sólo por la geografía española, también a nivel internacional. Una gira que, hasta la fecha, tiene esta ruta:
10 septiembre, Barcelona
26 septiembre, Sana Ana (EE.UU.)
1 octubre, Panamá
3 octubre, Lima (Perú)
10 octubre, Zaragoza
17 octubre, Sevilla
19 octubre,Monterrey (México)
20 octubre, Guadalajara (México)
21 octubre, México DF
Como os digo, el plan no era cualquier cosa. Me llama mi amiga y comadre Charo Guerrero, que a su vez es mujer de Manolo Summers, que a su vez es hermano de David Summers…, y, a partir de aquí, toca vivir el concierto de Hombres G #treintaañosyundia de una manera especial, entrañable y privilegiada.





Lo vivimos muy de cerca, casi pegaditos a ellos en todo momento: entrando en camerinos, presenciando las conversaciones previas que tienen todos y cada uno de los componentes del grupo, contagiándonos de los nervios lógicos en los instantes anteriores a su aparición en el escenario, participando de la alegría y el orgullo de sus familiares más cercanos…








En fin, como os podréis imaginar, para mí fue toda una experiencia. Como todas las jovencitas de la época de los 80, por aquel entonces seguía y perseguía a David y al resto de los Hombres G (Rafa, Dani y Javi), me sabía sus canciones y veía sus películas. Por eso, aquella noche en Algeciras, vivir el concierto de esta manera me trajo mil y un recuerdos…, me creí de nuevo adolescente.

Lamentablemente esa sensación sólo duro las dos horas del concierto en las que ellos se entregaron en alma. ¡Qué barbaridad, qué espectáculo y qué impresionante infraestructura! Después volví a mi realidad, que tampoco estaba nada mal, la verdad, pero con una bonita experiencia más para mis recuerdos…, aunque el 17 de octubre volveré a verlos en Sevilla, ¿os apuntáis? Me despido con algunas fotos de aquella inolvidable noche de concierto…


